Alguien dijo que un mar en calma nunca hizo buenos marineros. Cuando una prueba deportiva tan exigente como la 101km 24h de la Legión en Ronda, te hace salir de tu zona de confort y te enfrentas al reto de superarla, implica una capacidad de afrontar cambios, de adaptarte a un "mar" en movimiento, embravecido y sometidos a muchas incertidumbres. De alguna manera, mi participación por segundo año consecutivo en esta exigente y famosa prueba de ultratrail, el pasado 9-10 de mayo de 2015, me ha servido de comparación con las enseñanzas de que las dificultades te hacen aprender. Efectivamente ser cientounero por segunda vez ha sido una experiencia fantástica que me ha permitido ser consciente de los siguientes aprendizajes:
- El clima: El ambiente reinante en la prueba desde los primeros momentos (preinscripción el año anterior, la dificultad de conseguir dorsal -en la salida el coronel se refería a que éramos unos privilegiados, pues de las 21000 solicitudes, sólo 7.500 habían conseguido poder participar en la carrera- , la tarde del viernes con "la cena de la pasta", el día D, con la salida desde el Campo de Fútbol, el apoyo y ánimo de la gente durante toda la carrera y finalmente la llegada a meta en Ronda, es primordial para entender esta singular prueba. En relación con la empresa, el clima laboral u organizacional es un elemento fundamental que debe ser cuidado y alentado por directivos sensibles al verdadero papel que las personas deben representar en las empresas. Y deben ser conscientes de que un clima laboral inspirador, como el "clima" que rodeaba toda la prueba de los 101, es una verdadera palanca motivacional que hace a las personas más implicadas, comprometidas y enfocadas hacia la consecución de los objetivos empresariales.
- La soledad: Me decía un participante minutos antes de salir, que iba sólo, que "tocaba" afrontarla en"soledad". En una carrera de esta dimensión, con tantas horas por delante, la soledad puede ser una aliado pero también un enemigo a superar. Personalmente, hubo momentos de soledad en los que la dureza, cansancio, y sobre todo, lo que quedaba por superar, te hacía dudar de tus posibilidades, visualizabas la posibilidad de la retirada. En cambio, cuando de repente te unías a un compañero y comenzabas a conversar, el foco se apartaba de los escenarios licitantes, entre los que estaba el de la retirada. Te animaba/nos animábamos y seguías adelante. En la empresa, los "llaneros solitarios" también encuentran dificultades, por eso el trabajo en equipo, la cooperación y colaboración son elementos muy valorados y reconocidos por las organizaciones.
- La visión: La considero una habilidad fundamental para poder afrontar los 101. La visión que te permite "leer" la prueba con sentido común y con determinación. Visualizar la prueba te permite afrontarla con motivación, tomando decisiones adecuadas y siendo consciente del enorme esfuerzo que habrá que realizar. Tanto si es la primera vez, como si ya se ha terminado en otras ocasiones, la dureza de la prueba, el límite de las 24 horas, te exige tener claro el deseo de traspasar la meta, el objetivo de superar los 101 en el plazo establecido. En la empresa, la visión de los directivos es determinante de hacia dónde se quiere llevar a la empresa, que objetivos se quieren alcanzar, para lo cual se tomarán las decisiones adecuadas y necesarias para conseguirlos.
- El objetivo: Salir a la prueba con el objetivo de traspasar la meta antes de las 24 horas. Ese era el objetivo. La determinación era clara. Había que llegar, para lo cual era muy importante "ir leyendo bien la prueba". El calor, se llegó a los 40 grados, la alimentación, el calzado, el cambio de calcetines, la hidratación, la alimentación, las caídas, las subidas y bajadas, el frío de la noche, el temor por los gemelos, etc. Todo había que controlarlo, cualquier problema podía provocar la retirada. En la empresa, el objetivo es primordial, y su cumplimento garantía de supervivencia.
- La motivación: Para cumplir el objetivo, la motivación es la clave. Fuerza y superación son palabras muy repetidas en esta prueba. La actitud con la que se afronta es clave para superar el esfuerzo, cansancio, dolores y dificultades. Para conseguirlo, la motivación es tu mejor fortaleza. En la empresa, la actitud y motivación de los trabajadores son elementos intangibles de enorme importancia. Cuantos proyectos empresariales han ido languideciendo por falta de motivación de sus directivos y trabajadores. La motivación hay que cuidarla y trabajarla.
- La estrategia: Superar la prueba de los 101 implica desarrollar una estrategia que te permita ir superando los diferentes obstáculos: calor, cansancio acumulado, dolores, resistencia del cuerpo, alimentación, etc. Dice mi hermano Beni, experto en esta prueba, que a partir de los 50 km (más o menos al llegar a Setenil) es como si se comenzara otra prueba: quedan otros 50 km. y el cuerpo está ya muy cansado. Por eso es tan importante saber "leer" la prueba conforme vaya discurriendo. La estrategia seguida garantizará el éxito: llegar a meta. En la empresa la estrategia está en que se vincula con los resultados. Los objetivos no bastan, se necesitan las acciones concretas en cada escenario. Su complejidad e incertidumbre es fruto de la síntesis que realiza de los elementos de la propia empresa y del entorno.
El marinero aprende con la experiencia, enfrentándose a mares, a vientos y mareas, a tormentas, a noches y días, o incluso no saliendo a la mar cuando ésta está imposible. Igual que el cientounero, que crece como deportista sabiendo entrenarse adecuadamente, alimentándose e hidratándose conforme el cuerpo lo necesite, dosificando la marcha, descansando cuando proceda y curándose las ampollas y contracturas, o retirándose si fuese necesario. En las empresas, como sistema complejo, se desarrollan múltiples funciones que deben coordinarse y desarrollarse, mezcla de muchos de los aprendizajes antes descritos. Y es que abordar una prueba como los 101, y poder cumplirlo tras 23 horas y 17 minutos ha sido una "empresa" apasionante. Una empresa con muchos aprendizajes en forma de:
- Reconocer la importancia del equipo para apoyarse y colaborar mutuamente,
- Destacar lo clave que es seguir una estrategia que tenga en cuenta todas las variables y se aborde una toma de decisiones acertada y convincente, resultado de "leer" adecuadamente los diferentes elementos y aspectos de la prueba,
- Resaltar que la actitud y motivación con la que afrontamos cualquier reto por simple o importante que sea, son la base de nuestro comportamiento, el motor de lo que hacemos y decidimos.