"El talento gana partidos, pero el trabajo en equipo y la inteligencia ganan campeonatos"Michael Jordan
Participar en una prueba de trail como la de "Guzmán el Bueno X - Sierra Morena" (III trail-running, Córdoba, 22-3-2014) es una experiencia magnífica. Traspasar la línea de meta tras superar 30 kilómetros de subidas, bajadas, lluvia, sol, etc. es algo muy especial. Esta experiencia personal me hace reflexionar sobre la importancia del deporte como escuela de aprendizaje. Efectivamente, el deporte nos proporciona un conjunto de herramientas y técnicas que conectan perfectamente con la gestión personal y con la gestión de personas en una empresa. Podemos encontrar conocimientos, valores, técnicas y objetivos que en un trasvase bidireccional deporte-empresa, permiten enriquecer las posibilidades de ser aplicados en ambos entornos.
La carrera de trail "Guzmán el Bueno X" se puede calificar como muy exigente, que requiere preparación física y mental, adaptación al entorno físico y aceptación de las limitaciones y posibilidades personales. También es compañerismo, afán de superación y competitividad. Algunos elementos que destaco especialmente cuando he preparado y participado en esta carrera son los siguientes:
- La motivación: Te das cuenta de la importancia que tiene la motivación para conseguir algo. En lo deportivo, la motivación ofrece numerosas oportunidades de demostrar cómo el afán de superación, el anhelo por conseguir nuevos objetivos es la principal herramienta de que disponen las personas para alcanzar las metas. En la empresa, la motivación es básica para lograr implicación, compromiso, satisfacción en la tarea y desempeño realizado.
- Los indicadores: La perfecta organización, la señalización, la publicación de tiempos y medias alcanzados por cada corredor, la clasificación conseguida son señas de identidad que el deporte suele cuidar bastante. Las empresas pueden aprender de la necesidad de mejorar los indicadores de medición de sus procesos. Recordemos la máxima de la calidad: lo que no se mide no se puede mejorar.
- El equipo: Si algo caracteriza al deporte es que el equipo cuenta más que la individualidad. En las empresas hay una gran asignatura pendiente en esta materia. El trabajo en equipo, la cooperación y la colaboración es la base de la sinergía, por la cual los grupos alcanzan metas superiores.
El deporte enseña a la empresa la importancia de la planificación, la necesidad de la capacidad de aprender y de contar con un liderazgo que inspire:
- La planificación: Se necesita porque una empresa es un sistema complejo en el que intervienen muchos elementos que deben coordinarse adecuadamente, atender todos los detalles para que el engranaje de la empresa funcione óptimamente. Si falla una pieza, un elemento, un recurso, el engranaje se paraliza o deja de funcionar como debe. El éxito del deportista se basa en su entrenamiento previo, en la "planificación" para la competición.
- Capacidad de aprender: La empresa debe estar en continuo aprendizaje, adaptándose al entorno, aprendiendo de los competidores, buscando la innovación y la creatividad como fuente de supervivencia. El deportista necesita aprender nuevas técnicas, conocer el terreno, los competidores.
- El liderazgo: Las empresas, los equipos necesitan líderes que sean capaces de crear sentido de pertenencia, de unir y cohesionar al grupo hacia objetivos y proyectos ilusionantes, que saben reconocer y desarrollar el talento de cada miembro del equipo, que celebra éxitos y victorias y encuentra las enseñanzas para seguir adelante. El deportista necesita de un entrenador que le guíe, le marque los planes de acción, los progresos, le corrija hábitos y desarrolle nuevas técnicas.
El deporte, como en la empresa, como en las personas, implica desarrollar el talento y el potencial que todas las personas encierran. San Ignacio de Loyola recomendaba en sus Ejercicios Espirituales, fijarse metas cada vez más altas. Para ello, y siguiendo a Daniel Coyle, las estrategias que se pueden seguir son las siguientes:
- Ponerse en marcha: Querer algo es activar nuestra motivación para conseguirlo.
- Mejorar las habilidades: A través de métodos y técnicas para realizar los máximos avances en el menor espacio de tiempo.
- Mantener los progresos: Venciendo el estancamiento con nuevas estrategias, fortaleciendo la automotivación y consolidando hábitos que permitan seguir mejorando y progresando.
Dice Kilian Jornet, en Correr o morir, que "el secreto no está en las piernas, sino en la fuerza de salir a correr cuando llueve, hace viento o nieva", y que "la lucha es lo que diferencia una victoria, a un vencedor". Efectivamente, el deporte se vincula con el sufrimiento y el afán de superación, elementos que se convierten en determinantes en el contexto de una empresa, que necesita de una continua revisión para mantenerse en un mercado exigente y competitivo.
Hoy me gustaría felicitarle por dos razones: la primera, como siempre… por la magnífica entrada en su blog y la segunda por conseguir esta meta en la que me hubiese gustado estar pero que por problemas físicos lamentablemente no pude realizar. El atletismo es considerado por la gran mayoría de las personas como un deporte caracterizado por su individualidad y competitividad, pero… me atrevería a decir que es el único deporte donde si caes al suelo quien tienes a tu lado te ayuda a levantarte, donde si te quedas sin agua… tu rival (compañero) comparte la suya y, en fin, un deporte donde tus metas las alcanzas gracias a quienes corren contigo. Como muy bien aplicó usted al mundo de la empresa… yo me referiré al académico, donde nuestro objetivo es un largo recorrido, una carrera de fondo, con infinidad de cuestas y terrenos escarpados… donde hay una meta, pero lo más importante es el camino y todo lo que hay en él. Concluyo; "La fuerza no viene de la capacidad corporal, sino de la voluntad del alma." (Gandhi)
ResponderEliminarUn saludo
Gracias José María por tu comentario. Dices cosas muy interesantes. Efectivamente el deporte, y el atletismo en participar, son un ámbito en el que las virtudes del compañerismo, la ayuda mutua y trabajo en equipo lucen su mejor expresión. También el deporte, como muy bien dices, nos muestra cómo la actitud personal y la voluntad de querer conseguir algo es la principal "gasolina" que disponen las personas. Y esto es trasladable a muchos ámbitos, como el académico, que muchos lo transitan sin visión, pero que es fundamental trazarse un escenario, y recorrerlo siendo consciente de que hay, habrá, dificultades, "cuestas y terrenos escarpados", pero se necesita saber donde ir; sin una meta, los objetivos se hacen más "cuesta arriba". Por eso, insisto tanto en que el alumno debe trazarse una estrategia más o menos detallada, para ir sabiendo tomar decisiones en la línea adecuada.
ResponderEliminarUn cordial saludo